La campana extractora de humos sin conductos Esco Ascent™ Max (ADC) utiliza un sistema de filtración de carbono para eliminar los vapores químicos tóxicos y reciclar el aire limpio para devolverlo al laboratorio.

Este principio de flujo de aire brinda protección al operador y al medio ambiente. Las campanas extractoras sin conductos se están convirtiendo en una alternativa viable a las campanas extractoras con conductos, ya que no requieren sistemas de extracción y su función plug-and-play evita cualquier tiempo de inactividad en el laboratorio.

Las campanas extractoras sin conductos de Esco también ofrecen ahorro de energía, comodidad y movilidad.

La serie Esco Ascent™ Max-B (ADC-B) es el modelo estándar de campana extractora sin conductos. Esta unidad está equipada con un filtro de carbón principal y se utiliza para aplicaciones generales como dilución, mezcla, preparación de soluciones tampón, etc.

 Construcción robusta de la campana

• Los componentes clave, incluidas las lámparas fluorescentes, el condensador del motor, las piezas eléctricas y el control del interruptor, se montan fuera de la corriente de aire y lejos de las áreas contaminadas para permitir un fácil servicio.

Ventilador centrífugo

• Los ventiladores lubricados permanentemente son energéticamente eficientes con un diseño de motor de rotor externo que reduce los costos operativos.

• Nivel de ruido y vibración extremadamente bajo.

Sistema de filtración

 • Filtro principal: Carbón activado Nanocarb™, disponible en 8 tipos

• La sujeción perimetral eficiente garantiza que no haya fugas y permite un procedimiento fácil de cambio de filtro.

Sensor de COV opcional

• Detecta la presencia de compuestos orgánicos volátiles en el escape y emite una alarma para indicar la saturación del filtro.

Opciones de encimera

• La encimera de acero inoxidable estándar se puede actualizar a resina fenólica o epoxi para una mejor resistencia química.

Recubrimiento en polvo antimicrobiano Isocide™

Elimina el 99,9% de las bacterias de la superficie dentro de las 24 horas siguientes a la exposición.